Lo que distingue el carnaval de Santiago de otras ciudades dominicanas es su carácter popular. Al contrario de otros carnavales, el público puede asistir disfrazado también, lo que hace de esta manifestación cultural una de las más plurales del país.

El acceso a la ruta de desfiles es gratuito y el público se acerca voluntariamente a disfrutar de los disfraces, la música y el ambiente alegre que cada domingo se vive en la zona.

Históricamente, las comparsas salían a pie de los barrios a los parques o calles principales del sector (Los Pepines, La Joya, Pueblo Nuevo) zonas que hoy coinciden con lo que se define como centro histórico. A finales del siglo XX, el desfile se concentró en la llamada zona monumental (alrededor del Monumento a los Héroes de la Restauración), incluyendo la calle Del Sol y las avenidas Las Carreras y Francia.

En 2025, los desfiles se trasladan al Parque Central, debido a las obras del monorriel que afectan el área del recorrido tradicional.

Los desfiles se realizan todos los domingos de febrero y, en el desfile final, se presentan los mejores disfraces de grupos y comparsas que concursan para ganar premios. Este concurso es organizado por el Comité Organizador del Carnaval de Santiago, una entidad integrada por las autoridades civiles de la ciudad, representantes de grupos carnavalescos y entidades del sector privado (canales de televisión, entre otros) que apoya esta manifestación cultural arraigada en la tradición.

Aunque se realiza transmisión televisiva por los principales canales de la ciudad, nada se compara con presenciar en primera fila cada personaje, desplegando su alegría y creatividad.

Author: Sarah Sáchez